Mucho de nosotros queremos tener un animal para que nos haga compañía, porque nos gustan o por cualquier otro motivo.
Cuando adoptamos o compramos un perro, preferimos que sea cachorro para poder educarlo a nuestro gusto. ¿pero sabemos hacerlo correctamente? Pues nosotros pensamos que sí, sin saber lo que realmente estamos haciendo. Tendemos a humanizarlos, pensar que lo que nos gusta a nosotros, les gusta a ellos o simplemente, que ellos tienen las mismas necesidades que nosotros y en muchas ocasiones nos equivocamos y luego ciertas conductas nos suelen resultar molestas y preferimos deshacernos de ellos de cualquier manera. Mucha gente los dejan en las calles, carreteras, autopistas y algunos los cuelgan en los árboles para que tengan una muerte lenta y dolorosa en forma de venganza contra ellos.
Sólo quiero hacer saber, que muchos de los problemas o conductas que adoptan nuestros perros son por una mala educación del propietario que sin saberlo, nos equivocamos. Estas conductas tan molestas para nosotros, pueden ser corregidas o extinguidas mediante un veterinario, terapeuta de la conducta o un adiestrador.
Sólo hay que tener ganas de trabajar con nuestro animal y dedicarle un poco de nuestro tiempo a esa mascota que mas de un día nos hizo felices y nos dió una gran alegría cuando llegó por primera vez a nuestra casa.
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